Hoy les traigo una revelación de la Palabra del Señor muy impactante. La misma se encuentra en 1 Corintios 2:9 “Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman”. Cuando vemos llegar una bendición a nuestras vidas, sin haberla pedido, es el cumplimiento de una de las muchas promesas que Dios tiene para bendecirnos. No necesariamente es algo para suplir una necesidad física, si no para suplir a tu vida una necesidad espiritual. Algo por lo cual le estarás muy agradecido al Señor porque sentirás el gran amor que El tiene por ti. Verdaderamente los tesoros que Dios guarda, para sus hijos los guarda, y ésa será nuestra mejor herencia. Dios los bendiga.